Cuando terminé de estudiar los tres años de homeopatía (Diplomado, Postgrado y Máster), la sensación que reinaba en mi corazón era confusa. Por un lado, ya sabía bastante de terapéutica y de tratamientos; sabía bastante de repertorización y sabía bastante de rúbricas psicológicas y de familias de remedios. Es decir, tenía en mi mano (aunque no en mi cabeza) todo el arsenal con que puede contar un homeópata para empezar a ejercer su función terapéutica y profesional. Sin embargo, y de ahí la confusión de mi corazón, me faltaban grandes dosis de seguridad, de confianza en mis conocimientos y en mis habilidades terapéuticas en el cara a cara.
Como en todo, la cuestión es la práctica y el aprender de cada experiencia. Es cierto, pero a nadie le gusta jugar con la salud de un paciente o no encontrar la solución adecuada, por mucha confianza que uno tenga en la homeopatía. Pese a ello, me decidí a abrir la consulta y a saltar al ruedo.
No quiero que esto sea un texto de mis memorias y experiencias en consulta, sino que es justo lo contrario. Es un texto sobre esas casualidades que nunca terminan de ser casuales y que al final son las que cualquiera necesita para recuperar la confianza y caminar por la vida con tranquilidad y paz.
Participando en uno de los foros de homeopatía, www.hpathy.com exactamente, una de las homeópatas profesionales que en ella participaban -(Elaine Lewis, alias Snoopy)- aconsejó un libro titulado HAHNEMANN Revisited. A Textbook of Classical Homeopathy for the Professional (2001), de Luc De Schepper.
Pese a que su precio era alto y había que pedirlo a Estados Unidos, lo hice más por confianza en Elaine que por la esperanza de descubrir algo nuevo. Lo recibí y lo leí casi de un golpe. Y me marcó para siempre.
Lo primero que descubrí fue que la Homeopatía es más fácil de lo que los profesionales dicen y más difícil de lo que la gente cree. Pero en este libro la Homeopatía era tan clara, estaba tan sencillamente explicada que todo parecía fácil y de sentido común. Lo segundo que descubrí es que, cuando tienes dudas sobre cómo actuar en homeopatía, lo mejor es remitirse a las fuentes y no dejarse llevar por la moda de lo más actual, que casi siempre olvida por el camino aspectos profundos e importantes que dejaron como herencia los pioneros. La tercera cosa que aprendí fue a utilizar las dinamizaciones LM –de las que hablaré en próximas entradas- y cómo estas diluciones facilitan en gran manera la labor del terapeuta sin el temor que pudieran producir las otras dinamizaciones. La cuarta cosa que aprendí fue a cómo tratar las enfermedades crónicas o de larga duración por medio de la doctrina de los miasmas. Evidentemente había leído con interés y profundidad el libro de Hahnemann sobre las Enfermedades Crónicas, pero no había conseguido entender hasta dónde podía llegar este tema, sus implicaciones y las posibilidades terapéuticas. Y finalmente, la quinta cosa que aprendí fue que para ser un buen terapeuta es necesario intentar al menos ser una buena persona. Lo digo porque el Dr. Luc lo transmite a través de sus libros. Es capaz de transmitir el respeto que los pacientes le producen, el cuidado con que deben ser interrogados y la compasión que nos merece cada paciente, no por estar enfermo, sino simplemente por el hecho de ser persona.
Desde aquella lectura, no he dejado de acudir innumerables veces a leer sus páginas –amenas, generosas, amplias y sensatas- y siempre he encontrado solución a mis dudas.
Pero su labor ha continuado año tras año con la misma entrega y con el mismo interés que el primer día. Otros libros fueron apareciendo de su mano: Achieving and Maintaining the Simillimum. Strategic Case Management for successful homeopathic prescribing (2004). Como su propio nombre indica es un estudio sobre cómo dirigir los casos en función de la respuesta de nuestros pacientes. En él se analizan todas y cada una de las posibilidades, con ejemplos, con tablas, con esquemas, de tal manera que siempre encontramos una solución para seguir el camino de la curación y para liberar –siempre que sea posible- a nuestros pacientes del desequilibrio y devolverles la salud.
El último libro que ha publicado ha sido Advanced Guide for Professional Homeopaths. A companion book to Hahnemann revisited and Maintaining the Simillimum (2008), donde vuelve a insistir en las formas de reconocer un miasma presente, en la forma de dar la medicación, las dosis y las dinamizaciones, y también el estudio de niños con necesidades especiales.
Desde hace algún tiempo se viene anunciando un estudio sobre los sueños, las desilusiones y la homeopatía en relación con las teorías de Jung. Pero hasta la fecha seguimos esperando con ansiedad su aparición.
Es curioso que en España no es en absoluto conocido y por lo tanto no es llamado para dar seminarios, ni cursos ni conferencias. Realmente es una gran pena. Si alguien quiere contactar con él, puede hacerlo en www.drluc.com Desde allí tendrá acceso a otras páginas web y otros blog donde escribe y participa (http://drluc.blogspot.com).
Un último dato: Siempre me sorprendió saber que él, experto y curtido homeópata, suele siempre dar una dosis del medicamento seleccionado en una dinamización 6CH (dinamización muy baja y de corto alcance, para los legos) y es capaz de esperar dos días hasta ver si hay alguna reacción negativa en el paciente. Si no la hay, entonces el paciente puede pasar por la consulta a recoger su medicamento en la potencia adecuada; si hay alguna reacción, entonces se le vuelve a dar hora para revisar el caso antes de hacer algún mal irreparable. Desde mi punto de vista, es un maravilloso gesto de humildad y sobre todo de compasión por el paciente. ¡Chapeau, Dr. Luc!
Hola Sr. Andrés, soy Manuel Bustos y me siento muy identificado en lo que escribes, yo estudié tres años de homeopatía creo que en el mismo sitio que usted, en el Institut homeopatic de Catalunya y justamente cuando terminé me pasaba lo mismo, sobre todo estaba confuso como aplicar esta maravillosa técnica y todo lo que había aprendido. Pienso que hay que pasar a la práctica, pero con precaución
ResponderEliminar"si no curas al menos no dañes " y sobre todo para ser un buen homeopata hay que olvidarse del nombre de la enfermedad y trabajar con los síntomas. He leído la página del Dr. Luc De Schepper y este señor es un gran homeópata y una gran persona. Saludos y le deseo grandes éxitos en su trabajo.
Estimado Sr. Bustos:
ResponderEliminarMuchas gracias por sus palabras.
He visitado su blog y me parece veraz, interesante y abierto. Le felicito por su generoso trabajo.
Lo que Ud. comenta sobre la práctica con precaución, es totalmente cierto. No debería permitirse uno mismo meterse en casos complicados sin haber tenido experiencia con lo que parece simple. Pero cuando uno termina sus estudios, parece que lo que quiere es actuar, no importa dónde ni importa ante qué enfermedad, pero practicar. Es una forma de aprender y, si uno es humilde, entonces puede extraer mucha enseñanza de sus errores y aciertos.
Ciertamente el Dr. Luc es una gran persona y un magnífico homeópata. merece la pena leer sus libros para comprender que la Homeopatía es un sistema, tan abierto como nosotros queramos, pero tan preciso como nosotros sepamos hacerlo.
Con el tiempo uno se da cuenta de que la curación suele venir de la precisión, más que de la intuición.
Espero que no dejemos perder este contacto entre Ud. y yo.
Si desea contactar conmigo, sería un placer facilitarle el acceso al blog Homeópatas en el Alambre.
Quedo a su disposición.
Saludos cordiales
Hola Andrés, por supuesto que me gustaría mantener contacto con usted
ResponderEliminarcuando quiera me puede facilitar el acceso al blog del que me habla.
Saludos cordiales
Hola una pregunta que opinais sobre os protocolos Banerji
ResponderEliminarHola, Anónimo!
EliminarLos doctores Banerji son unos reputados médicos homeópatas indios que han conseguido tratamientos efectivos del cancer con homeopatía únicamente.
Por otro lado, en su práctica han llegado a probar la efectividad de ciertos tratamientos pluralistas en enfermedades habituales. Dentro de la ortodoxia, no serían los más ortodoxos, pero dejando esto de lado, tienen fama de que sus tratamientos funcionan.
Yo, personalmente, no los uso.
Saludos cordiales